Hay un tiempo para amar y un tiempo para sufrir, un tiempo para gozar y un tiempo para morir y evidentemente, todo ello forma parte del tiempo de vivir. Si con los medios a nuestro alcance y ayudados por el, a veces, oculto afán de superación, nos empeñamos a ser cada día mejores en nuestro tiempo de vivir y si procuramos ver la vida por su lado más logico y amable, entonces lograremos que nuestro tiempo de amar sea más vívido y nuestro tiempo de sufrir más llevadero nuestro tiempo de gozar más denso y nuestro tiempo de morir más digno.
ROMAN DANIEL - EDICIONES 29