Algo raro sucedía, pues ya casi era hora de partir y aún estábamos ahí anclados julián caminaba de un extremo a otro del furgón, yo hacia otro tanto.nos mirábamos y no dejábamos de sonreír. Esperábamos con paciencia a que llegara el tan anhelado momento de la partida.
MESA RUBEN - UNIVERSIDAD PONTIFICIA BOLIVARIANA